Por Agustina De Bernardis/Rodolfo Venegas/Federico Pinillos
El próximo fin de semana se disputará el partido más importante para el fútbol rosarino y la zona en la cancha de Rosario Central, razón por la que la ciudad de convulsiona como en ninguna otra ocasión.
Se juega una edición más del clásico de fútbol entre Central y Newell’s, el evento más importante de nuestra ciudad, involucra a miles y miles de almas, desde los empleados de cada club, pasando por los “choripaneros”, los que venden banderas, la policía, los periodistas, hasta cada uno de los hinchas que vive de una manera muy pasional este partido, no sólo los dedicados al fútbol, sino también los que realizan otros deportes como rugby, basket, hockey, etc. es por eso que es muy preciso, para este acontecimiento, el calificativo de revolución.
Se realizó una entrevista a los chicos del Club Logaritmo Rugby para saber como vivían ellos el clásico rosarino y nos comentaron que a pesar de jugar un deporte muy distinto vivían con gran pasión este partido de fútbol: “yo soy fanático de Central y me encantaría que gane ya que hace dos partidos que no podemos quedarnos con el clásico” afirmó franco de 16 años. “Andá rueguen sacar un empate” le contesta miguel compañero de división hincha de NOB. También nos contaron que como sus partidos de rugby se juegan los domingos organizaron quedarse todos juntos a comer en el bar del club para ver el cotejo y que tienen pensado invitar a los del equipo rival a compartir el momento ya que es seguro que la gran mayoría de los jugadores se dividen entre “canayas y leprosos”. Entre los mas grandes del club Logaritmo, los jugadores que integran el plantel superior, la cosa se hace mas seria ya que se registran apuestas de dinero bastante altas: “yo apuesto veinte pesos, no tengo problema si vamos a ganar mínimo dos a cero” dijo Pablo de 26 años simpatizante de Rosario Central.
Dentro de la misma institución interrogamos a las chicas de hockey que nos demostraron ser unas entendidas en el tema del fútbol y nos expresaron sus inclinaciones por los dos equipos y hasta por algunos jugadores en especial como el “Chino” Vizcarra Y el “Cabezón” Bernardello.
El clásico siempre es especial, diferente, pasional. Hace que Rosario cambie y los hinchas jueguen el partido a su manera mucho tiempo antes del encuentro, unas semanas antes, y mucho tiempo después. Sólo quieren ganar, y la mayoría desea que todo sea en paz, pero lamentablemente siempre hay “energúmenos” de una u otra hinchada que se encargan de poner en riesgo la seguridad de la mayoría de los concurrentes a la cancha, es por esto que se entrevistó al oficial Oscar Ramírez que nos contó como se vive desde su lugar un evento tan importante como peligroso: “es muy difícil controlar una enorme masa enardecida de hinchas tanto de Rosario Central como de Newell’s si sus respectivos equipos llegan a perder, están previstos mas de 1000 efectivos y no sabemos si podemos asegurar una calma al ciento por ciento, además es fácil echarle la culpa siempre a la policía cuando se producen disturbios”. También Ramírez enfatizó: “a mi entender muchas veces la responsable es la misma gente que no sabe reaccionar ante un resultado adverso y toma represalias con lo primero que encuentra, como por ejemplo una vidriera de un negocio cercano a la cancha. Los efectivos policiales no podemos estar en al cabeza de todas las personas para prevenir hechos de esa índole”.
La recorrida finaliza en cercanías de la cancha de Rosario Central, más precisamente en calle Génova y Juan José Paso en donde se encuentra un puesto de “choripanes” a cargo de Roberto, “Tito” para los amigos, que nos contó como se vive un clásico desde su punto de vista y desde su lugar de trabajo: “siempre que hay partidos esto es una locura de gente, parece la Peatonal Córdoba y mas ahora que viene el clásico no se puede ni caminar y por suerte no damos a vasto con la demanda, vendo para todo el mes, un día así”. Roberto contó que se vende tres veces mas choripanes que en un partido normal y eso que él está ubicado en el sector donde acceden sólo hinchas de Rosario Central, que por ser el partido más importante del año concurren en un mayor número que en otras ocasiones.
El Estadio Gigante de Arroyito estará colmado de simpatizantes hambrientos de gloria, está todo preparado para que sea un verdadera fiesta del fútbol local, esperemos que se desarrolle en total armonía cualquiera sea el ganador.